EUROPA PRESS

22 junio 2016

 

 

Los tatuajes de 'henna' pueden provocar algunos casos de dermatitis y alergia

 

La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) ha avisado, con motivo del comienzo del verano, que los tatuajes de 'henna' que proliferan en esta época del año pueden provocar algunos casos de dermatitis y alergia, debido a la parafenilendiamina, sustancia que permite fijar mejor el dibujo en la piel.

 

Pero no sólo los tatuajes pueden provocar alergias en verano, sino también la alimentación, los animales, el agua de las piscinas, las cremas solares o las picaduras de los mosquitos. En concreto, los expertos han avisado de que existen alergias en la piel (eccemas) que precisan de las radiaciones solares para producirse, siendo las causas más frecuentes algunas plantas o los filtros que contienen algunas cremas solares. "En el caso de los medicamentos antiinflamatorios y algunos antibióticos, el efecto fotosensibilizante puede producirse tanto por la aplicación en la piel como por su ingesta", han explicado.

 

Asimismo, las reacciones alérgicas por alimentos pueden incrementarse en verano a causa de un "mayor descuido", y es que, siete de cada diez reacciones se producen fuera del domicilio. En este sentido, la SEAIC ha aconsejado a los alérgicos a alimentos vigilar todos los productos que se ingieren leyendo detenidamente los ingredientes que los componen: leche o frutos secos en los helados, trozos de frutas como melón, kiwi y melocotón en postres y batidos; mariscos en pastas o ensaladas, etcétera, y preguntar siempre a los cocineros en caso de duda.

 

El verano también es una época en la que los niños se quedan al cuidado de familiares, por lo que se recomienda que estas personas encargadas estén bien enteradas de los alimentos que se deben evitar, así como posibles fuentes de exposiciones ocultas. Igualmente, deben estar familiarizados con los medicamentos que debe tomar el niño alérgico en caso de una reacción así como en el uso correcto de los dispositivos de autoinyección de adrenalina.

 

Del mismo modo, algunas frutas como cerezas, melocotones o paraguayas pueden causar urticaria al contacto con la piel de la fruta en las manos y los labios, aunque también pueden causar síndrome de alergia oral, inflamación y picor en la boca, los labios y la garganta al comerlas. La manifestación puede ser más grave y llegar incluso a causar un shock anafiláctico.

 

"Frutas como melón y sandía frecuentemente producen síntomas en la boca en pacientes alérgicos a pólenes. Si se han padecido síntomas previamente con la ingesta de frutas, se recomienda una consulta con el alergólogo para recibir instrucciones precisas de cuáles se pueden tomar y cuáles se deben evitar en cada caso concreto", ha aconsejado la asociación.

 

Además, los baños frecuentes en piscinas en los meses de verano empeoran los síntomas de dermatitis atópica en muchos pacientes, particularmente en niños. Ante esto, los alergólogos han asegurado que usar agua salada en vez de clorada y bañarse en el mar, por el contrario, mejoran las pieles atópicas. Es importante un buen aclarado de la piel con agua dulce tras el baño en la piscina y seguir haciendo uso de las cremas hidratantes.